Y por fin llegó la esperada primavera. Aunque últimamente parece el principio del invierno no nos engañemos, seguro que pronto van a legar los días del famoso “caloret”.
Este mes tenía varias opciones para publicar en el blog y una de ellas eran las famosas torrijas, pero para que voy a repetirme tanto, las redes sociales están ahora a tope de ellas así que me he decidido por esta receta de galletas.
Alguien me dijo un día que las palabras galleta y receta le asustaban y creo que la gente está muy equivocada. Para mí las galletas son de lo más fácil de hacer, sí es verdad que te quitan más tiempo que un bizcocho o unas magdalenas pero val la pena hacer en casa galletas de vez en cuando, no tienen nada que ver con las de compra y además son mucho más sanas.
Para cambiar de estación os traigo unas ricas galletas de pastanaga. Sí, ¡zanahorias! No es la primera vez que publico un dulce aquí con ellas y es que me gusta mucho añadirlas al mundo de la repostería, además de originales están deliciosas.
A mí hija Aitana la pastanaga no le hace mucha gracia y se me ocurrió probar esta receta, junto a estas galletas, le encantan. Aunque sea sin querer pastanaga, jajaja.
Ingredientes para 24 galletas:
- 225gr de mantequilla a temperatura ambiente
- 225gr de sucre
- 330gr de harina
- 100gr de pastanaga, rallada muy fina o triturada (Yo prefiero triturada)
- 1 cucharadita de canela en polvo
- Una pizca de sal
- Una pizca de cardamomo y jengibre (Opcional)
En el orden en el que están dispuestos los ingredientes mezclamos en un cuenco con las manos.
Amasamos muy bien integrando uno a uno todos ellos hasta quedar una bola compacta, la enrollamos en papel film y dejamos en la nevera una horita más o menos.
Precalentamos el horno a 180º y nos disponemos a formar las galletas.
Ahora sin manosear mucho, cogemos un trozo de masa, aplastamos sobre un papel vegetal - yo me ayudo de un rodillo pequeño para que la superficie quede más lana y fina - debe quedar casi de 1 cm de grosor, con un cortador de galletas o un vasito cortamos la masa y la dejamos sobre otro papel vegetal y sobre la bandeja del horno. Hacemos todo lo rato lo mismo hasta terminar con toda la masa.
(Si quieres hacer menos trabajo podéis hacer bolitas de masa y cada bolita aplastarla en el papel vegetal, las dejes tal cual para hornear. Así os quedará también genial y cada una de un tamaño).
Una vez tenemos la masa preparada para hornear, metemos en el horno 10-15 minutos a 180º, llega y abajo.
Sacamos y dejamos enfriar. Las galletas cuando salen del horno siempre son blandas, hasta que no se enfrían no se endurecen así que intente no ser muy impacientes.