Todo gran proyecto urbanístico responde a un concepto. Una idea que se inspira en una forma de ver y entender la ciudad, en un momento concreto. En la actual, después de haber constatado que el cambio climático no es ninguna fantasía y que en Ontinyent amenaza con riadas y desbordamientos del Clariano mucho más frecuentes, el objetivo apunta hacia la mayor reforma en un siglo del barrio de la Alfarería.
Un proceso, “de gestión muy compleja”, tal y como se reconoce desde la propia Oficina Técnica del Ayuntamiento, pero que pretende “convertir al río en la fachada principal de la ciudad, que no sea la parte trasera, todo lo contrario , crear recorridos para los ciudadanos. Y esto pasa por una solución que ofrezca una alternativa a los vecinos que todavía habitan en esta zona, pero fundamentalmente, pasa por el derribo de viviendas y la creación de una zona verde”.
RESISTENCIA
Lo que ya se ha acordado. De las 44 viviendas (integradas en un total de 24 inmuebles), situadas entre los números 151 y 197 de la calle Cantereria, ya se han adquirido 29. Se han invertido 605.000 euros en la compra de estas viviendas.
Lo que falta. De las 44 propiedades, todavía quedan 15 por adquirir. Existe una previsión de inversión que alcanza los 385.000 euros para concretar esas adquisiciones. Los que resisten. Son 5 los propietarios que no han cerrado acuerdo para vender sus hogares. El consistorio no da carpetazo, insiste en que seguirá negociando, pero en el horizonte se sitúa una modificación del Plan General que articulará la gran transformación del barrio con el derribo de las casas y la creación del parque inundable.
Para ese acometido, se reserva la aplicación de posibles expropiaciones de conformidad con la legislación.