Claravisión participa en un estudio internacional para testar los nuevos productos de Johnson & Johnson

La óptica Claravisión acaba de participar en dos estudios, uno a nivel mundial y otro a nivel nacional, para testar y valorar nuevos productos de las multinacionales Johnson & Johnson i Zeiss, respectivamente. Para el responsable de la marca, Javier Cantó “significa, por un lado, una responsabilidad en la que se ha involucrado todo el equipo y, por otro, una satisfacción por haber sido elegidos, por convertirnos en un centro de referencia para marcas tan prestigiosas”.

Lente de contacto

El primer estudio, a nivel mundial, implicaba a Claravisión en el trabajo de testar una nueva lente de contacto fotocromática, es decir, que se oscurece con la luz del sol. "Se nos pidió que valoramos la predisposición de nuestros clientes y cómo iba a funcionar este producto en el mercado español".

El objetivo consistía en enfocar el producto a personas que buscaran protección frente a los rayos ultravioletapero que no optaron por las gafas de sol. Entre las conclusiones que se aportaron al desarrollo de este estudio, cabe subrayar que se trata de una lente de contacto especial, “no de un consumo masivo sino más enfocada a una clientela especializada, por ejemplo deportistas, que necesitan una protección continua en su actividad. Este producto lo que posibilita es una mejora en la calidad de vida respecto a las lentillas convencionales”, explica Javier Cantó.

El segundo estudio, a escala nacional junto a otros nueve centros, ha consistido en valorar una nueva lente progresivapero que se plantea desde parámetros completamente diferentes a los que hasta ahora se suelen proponer. “Estamos acostumbrados a lentes diseñadas para situaciones estáticas. Aún así, hoy en día la vida es más dinámica y requiere que nos adaptemos al movimiento. Había que rectificar porque los hábitos, también los visuales, cambian”.

El estudio ha sido posible gracias a la nueva tecnología Zeiss que permite investigar cómo es la mirada en las personas, qué zonas del campo visual se utilizan más. “Se ha creado un cristal que se basa en las actividades diarias de las personas, en cómo varía su diámetro pupilar según los hábitos. Este cristal está listo para adaptarse a los cambios”, expone Javier Cantó.

A través de la inteligencia artificial que posibilita este aparato se mide milimétricamente la adaptación gracias a los valores que aporta la tecnología y la observación profesional. Javier Cantó, además, fue seleccionado como 'embajador Zeiss' para abanderar la presentación de este nuevo producto.

Implicación

Además de la implicación del equipo de Claravisión en este trabajo multidisciplinar también cabe resaltar la participación de los clientes (alrededor de 20 en cada uno de los estudios realizados). En el primero se invirtieron seis meses de trabajo y el segundo ha podido acometerse en poco más de mes y medio. Tiempo récord.