Cotoblau se convierte en la primera industria textil de España en conseguir la certificación ISO 28000

La empresa ontinyentina Cotoblau se ha convertido en la primera industria textil de España en conseguir la certificación ISO 28000 de AENOR, de Sistemas de Gestión de Seguridad para la Cadena de Suministro. Un reconocimiento que el alcalde de Ontinyent, Jorge Rodríguez, destaca que “reivindica la apuesta por la innovación que van haciendo las empresas del Clúster Textil Sanitario de Ontinyent con el apoyo del Ayuntamiento, un camino que debe seguir adelante para mantener y crear empleo en la ciudad. El apoyo a la industria ha sido y seguirá siendo uno de los pilares del trabajo del Gobierno de Ontinyent, y hoy estamos muy orgullosos de poder felicitar a una de nuestras empresas por ser pioneros y convertirse en referencia en la obtención de este certificado”, manifestaba.

El CEO de Cotoblau, Cándido Penalba, ponía de relieve que “frente a un mercado asiático en el que no podemos competir en precios, el camino que debemos seguir para ser competitivos y sobrevivir es el de la innovación y la calidad. Que los clientes de todo el mundo que compran un producto de nuestro Clúster Textil Sanitario sepan que están comprando productos de calidad y en todas las garantías”, señalaba.

En el acto de entrega de la certificación también intervenía el director de AENOR (entidad de certificación de sistemas de gestión, productos y servicios) en la Comunidad Valenciana, Salvador Ibáñez, quien también destacaba el carácter pionero de Cotoblau como industria textil en la obtención de esta certificación, que hasta ahora iban obteniendo empresas de transporte y logística, y que desde 2007 aborda los posibles problemas de seguridad en todas las fases del proceso de suministro. El objetivo es reducir los riesgos para las personas en todas las fases del proceso de suministro, analizando aspectos financieros, de fabricación, gestión de la información y logística, almacenamiento en tráfico o depósito de mercancías; y permitiendo identificar amenazas tales como terrorismo, fraude y piratería; así como mitigar los efectos de los incidentes de seguridad.