Crece la preocupación en el sector textil por la escalada de tensión entre Rusia y Ucrania

El sector del textil valenciano está especialmente “preocupado” desde hace unos meses por la subida sustancial del precio del gas que ha pasado de representar un 10% de los costes de la empresa al 30% o 40%, en función del precio. Sin embargo, la escalada de tensión entre Ucrania i Rusia ha puesto en alerta a todo un sector que en la Comunidad Valencia agrupa a más de 1.500 empresas, ya que uno de los problemas que se encuentra en el centro del conflicto es la dependencia de Europa al suministro de gas ruso.

Según explica el presidente de la patronal ATEVAL, José Serna, un conflicto de estas dimensiones aumenta la incertidumbre en un mercado que de por sí "ya es muy competitivo y con márgenes muy ajustados". Una problemática que angustia sobre todo al subsector de los acabados a terceros –formado por 35 empresas y 1.700 empleados en la Comunitat Valenciana– puesto que este tipo de industria necesita una gran energía calorífica para la estampación, tinturas, blanqueado o termo fijado, entre otros; y una subida del gas prolongada en el tiempo acabaría encareciendo con mayor intensidad el precio final del producto.

“Todo depende de cómo evolucione el conflicto y si Rusia emite alguna sanción económica en la Unión Europea. Pero lo que está claro es que los mercados energéticos son muy miedosos y cuando hay tensiones de este tipo la bolsa baja y sube el precio de las materias primas”, explica Serna. Unos precios que han registrado máximos históricos en los últimos meses, llegando a cobrarse 183 €/ MWh a finales de año cuando el precio medio suele rondar los 35/40€/MWh.

Durante décadas, Rusia ha utilizado la energía y los acuerdos de suministro como una herramienta para mantener cierta influencia en los países que dependen energéticamente de ésta. Ahora, en plena crisis diplomática, el suministro de gas en Europa podría convertirse en una arma de doble hilo para el gigante asiático, y es ese punto lo que preocupa a Serna. “El precio lo determina el mercado, y éste funciona según la ley de la oferta y la demanda, si hay menos oferta de gas se incrementará su precio”.

Exigen medidas de choque

Una decisión que podría afectar realmente a las economías europeas, pero sobre todo a la industria de la Comunitat Valenciana, donde se localizan el 22% de las empresas textiles de toda España. Si bien todavía es pronto para hacer un pronóstico de cómo afectará el conflicto ruso-ucraniano a nuestra economía, frente al incremento del precio de las materias primas, las organizaciones empresariales como la Confederación Empresarial de la Comunidad Valenciana (CEV) –de la que forma parte ATEVAL– reclama la puesta en marcha de medidas a corto y largo plazo con el fin de paliar las continuas alzas que puedan comprometer la economía.

En cuanto a las medidas a corto plazo destacan la reducción de los peajes de gas, desarrollar un estatuto especial sobre hidrocarburos o implantar un plan especial para ERTES por costes energéticos, considerando éstos como causa de fuerza mayor para la exoneración de los gastos de la Seguridad Social, entre otros. En cuanto a las propuestas a largo plazo, se concretan en crear una plataforma europea centralizada en la compra de gas natural que facilite la creación de reservas estratégicas en el ámbito de la Unión Europea.