Desaparece el pasaporte covid, menos en las residencias, y las restricciones en la hostelería

Ximo Puig anuncia el fin de las principales restricciones existentes en la Comunitat Valenciana. Foto de GVA.

El presidente de la Generalitat, ximo puig, ha anunciado el fin de las principales restricciones sanitarias existentes en la Comunitat Valenciana, a partir de este martes 22 de febrero. Así lo ha avanzado después de la reunión de la Mesa Interdepartamental para la Prevención y Actuación ante la COVID-19, en la que ha sido acordada la supresión de las principales restricciones vigentes, salvo el uso de la máscara en interiores y cuando no sea posible mantener la distancia de seguridad, y la prohibición de fumar en terrazas.

En concreto, el jefe del Consell ha explicado que decae la exigencia del pasaporte COVID en todos los establecimientos, excepto en las residencias y los centros sociales para proteger a la población más vulnerable; así como la limitación de diez comensales máximos por mesa, y la separación de metro y medio entre las mesas de los locales de hostelería.

Respecto a la exigencia de disponer de pasaporte COVID para acceder a residencias y centros sociales, el presidente ha señalado que solicitará al Tribunal Superior de Justicia de la Comunitat Valenciana la autorización para mantener la medida a partir del 28 de febrero, fecha hasta la que ya había sido autorizada.

Durante su intervención, en la que ha estado acompañado por la secretaria autonómica de Salud Pública y del Sistema Sanitario Público, Isaura Navarro, Ximo Puig ha señalado que después de 700 días desde el inicio de la pandemia, “empieza un nuevo tiempo ” en el que "vacuna, máscara y sentido común" serán las tres "grandes defensas para el nuevo ciclo".

Asimismo, ha asegurado que se mantendrá especial vigilancia sobre la COVID persistente y sobre los efectos en la salud mental.

Fiestas

El presidente ha insistido en que la pandemia "no ha terminado", por lo que ha señalado la necesidad de mantener la prudencia en un nuevo ciclo de "reactivación post-pandemia". En este sentido, se ha referido al comienzo de un calendario de fiestas en un “marco de práctica normalidad” que favorecerá la "recuperación emocional".