Quizá a eso se le llama no saber perder. O seguramente es desesperación. El filial orejuto llegó el domingo con todas las cartas para ser campeón del grupo sexto de la Tercera División. Lo sería si ganaba al Clariano, si repetía victoria en la última jornada y La Nucia no sacaba los 6 puntos. La primera condición no pudo cumplirla. El Castellón B cayó derrotado por 5-2 ante un Ontinyent totalmente destensionado que se despidió de su afición con juego y goles.
Pero en Castellón esa derrota no ha caído demasiado bien. Según ha publicado el periódico Mediterraneo, los orejudos han impugnado el partido por una supuesta alineación indebida. Dicen los albinegros que el Ontinyent utilizó el jugador Diego Cambra que estaba sancionado y debía cumplir un partido de castigo. Según siguen argumentando, el de Aielo de Malferit jugó los últimos minutos del partido saliendo desde el banquillo como repuesto. Y todo esto les ha llevado a denunciar al Ontinyent y pedir que les den la victoria. Un triunfo que les volvería a dar opción para el ascenso directo que logra el campeón del grupo aunque su máximo rival, La Nucia, empató también el domingo.
Respecto a la alineación indebida que argumenta el Castelló B, y que propaga la prensa de la Plana, nada más lejos de la realidad. Diego Cambra vio el partido asentado en la grada de tribuna. El jugador que salió y al que hacen referencia los orejudos es Ximo Reig, que disputó el último tramo del partido. Todo apunta a un error en la transcripción de los nombres que aparecían en el acta.