El Melón de Oro es uno de los productos más típicos y auténticos de Ontinyent y Vall d'Albaida, pero su producción no es fácil. Después de unos años en los que se apostó desde diferentes estamentos y se logró, incluso, crear una Asociación de Productores y Comercializadores del Melón de Or, ahora, algunos agricultores alertan de la falta de apoyo, lo que podría llevar a hacer desaparecer ese melón de secano. De los ocho miembros de la asociación, este año sólo plantarán dos.
Este lunes, el agricultor, Javier Ferri Llopis, plantaba las primeras semillas de la temporada de melón de oro. Este año ha decidido adelantarse un poco, ya que admite que la idea principal era sembrar dentro de dos semanas, pero, finalmente, después de escuchar a “unas cuantas personas mayores” que a través del método de las cabañuelas le han avisado de que se espera un verano “caluroso y tormentoso”, el ontinyentino ha decidido avanzar. Quizás las cabañuelas no son el método con más rigor científico, pero el cultivo del melón de oro, con su dificultad y complejidad, se ha convertido en todo un arte; y de eso, los que más saben son estas personas mayores, a las que Ferri hacía referencia, y que han dedicado toda su vida a trabajar en el campo. En 2022 nacía la Asociación de Productores y Comercializadores del Melón de Oro. En ese momento, fueron seis los campesinos que formaron parte de la agrupación, aunque, según explica Javier, llegaron a ser ocho. "Este año sólo seremos dos. La situación del melón de oro está en decadencia", alerta.
Para el campesino existen dos elementos destacables que hacen que la supervivencia del melón de oro en Ontinyent pueda estar en peligro. El primero es la climatología. Esta fruta es un melón de secano que tolera muy poco las lluvias y en un contexto de cambio climático, en el que cada vez los fenómenos atmosféricos nos sorprenden más, resulta muy complicado salvar la cosecha. La segunda cuestión es la falta de apoyo y acompañamiento por parte de las autoridades o organismos pertinentes. "No nos preguntan si plantaremos o si necesitamos algo. Nos tienen muy abandonados. Por ejemplo, en mi caso, yo ya he plantado y todavía no me han dicho a qué precio se puede llegar a pagar".