El mosquito tigre, las cucarachas y las palomas preocupan a los vecinos de Ontinyent

El mosquito tigre, uno de los insectos que ha llevado de cabeza a la población en los últimos años, se encuentra actualmente controlado. "El año pasado sí que se vivió una situación mucho más descontrolada que este año, ya que se ha enderezado gracias a un mayor control ya la concienciación de los ontinyentins en sus casas", manifiesta José Alberto García, técnico de la empresa CTL, concesionaria del control de plagas del Ayuntamiento de Ontinyent.

Para actuar contra el mosquito tigre, se está llevando a cabo “un control semanal mediante trampas y tratamientos de larvicida en sumideros y lugares públicos donde se envasa agua”. En total, hay 14 puntos de control en toda la ciudad y cada semana “se tratan unos sumideros de forma que, a final de mes, todos los que hay en la ciudad están revisados”. Además, "se ha adoptado un cambio de estrategia en su tratamiento", manifiesta el técnico de CTL.

Antes de que empezara el verano, se advertía también de una posible plaga de cucarachas en las ciudades. Pero en estos momentos, este insecto está también controlado. “Hay campañas correctivas y de control que se realizan con cierta periodicidad. Se ha introducido una medida innovadora como es “la pintura insecticida que tiene mayor efectividad por su residualidad y que sólo se aplica en las zonas de mayor infestación”.

Una de las plagas que en los últimos tiempos más preocupa al Ayuntamiento de Ontinyent son las palomas, por lo que “el consistorio está llevando a cabo una campaña semanal para tratar de controlar el nivel poblacional de palomas”. José Alberto Garcia explica que estas aves “son una plaga que transmite muchas enfermedades; deja suciedad en las calles, fachadas y coches; deteriora el mobiliario urbano y el patrimonio de Ontinyent. Ahora, esta situación se ha conseguido reconducir y controlar, aunque las palomas preocupan en zonas como el Barranquet, el parque Pere IV o el parque de Sant Rafel”.