El Museo Textil inicia nueva fase de obras y avanza hacia su apertura

El carácter industrial de la antigua fábrica de Revert es el que ha marcado la recuperación arquitectónica del espacio que acogerá todavía este año el Museo del Textil, si se cumplen los plazos anunciados por el Ayuntamiento de Ontinyent.
Este mes finalizarán los trabajos de rehabilitación, a cargo de los arquitectos Silvana Soler y Natxo Torró y ya se pueden observar los resultados. “Hemos procurado respetar la estructura de madera del techo, las vigas han sido recuperadas y reforzadas; se ha descubierto la superficie cara vista de las paredes originales y los arcos que estaban cegados son ahora ventanas abiertas a la luz ya las vistas, mientras que el suelo es de hormigón. Un espacio fiel al carácter industrial, concebido para ser multifuncional y adaptarse a las necesidades del museo”, explica Natxo Torró.
De este modo, Ontinyent recupera para la ciudad y la Comunitat Valenciana parte de su patrimonio fabril, que ahora luce con todo su esplendor y es un tributo a la industria que se ubicaba en estas naves.
El espacio exterior también va cobrando forma. Habrá una plaza de 3.100 m2 con arbolado y mobiliario urbano, que estará abierto a la ciudadanía y quiere ser un espacio de homenaje a alguna personalidad destacada de la ciudad, iniciativa que se está estudiando actualmente.
El alcalde, Jorge Rodríguez, destacaba “la buena sintonía existente en el patronato de la Fundació Museu del Textil Valencià, que ha permitido que estemos a punto de hacer realidad un proyecto que se remonta veinte años atrás, y con el que recuperaremos un edificio de arquitectura industrial de primer nivel para su uso como espacio creativo, divulgativo y de impulso en el sector”, recordaba.
Las obras tienen un presupuesto de 900.000 euros de los que 700.000 son aportados por la Generalitat Valenciana gracias a un convenio firmado con el Ayuntamiento, quien aporta los 200.000 euros restantes, mientras que el proyecto de la obra ha sido financiado por Caixa Ontinyent. La segunda fase de las obras para recuperar también la nave más cercana al río Clariano. Para hacer realidad la obra, que tendrá un coste de casi un millón de euros, se contará con una ayuda europea de 750.000 euros de los Fondos FEDER, a través del programa EDUSI, solicitando a la Diputación de Valencia y la Generalitat Valenciana que participan del proyecto, cuya redacción también será financiada por Caixa Ontinyent.
Está previsto que esta nave, aún por rehabilitar, cuenta con un vestíbulo de acceso, recepción, dos salas de exposiciones una de ellas con carácter temporal, una biblioteca y servicio de documentación, así como una sala de formación y didáctica para acoger iniciativas de divulgación.
Del mismo modo habrá una parte de porche, porque en el Plan General de Ordenación Urbana está diseñada la apertura de una nueva calle, paralela a Gomis y Maians y, para evitar futuros derribos se hará una estructura diáfana, según explican fuentes municipales.
El museo también está previsto que alberga un espacio gastronómico.