El parque inundable de la Cantereria redescubrirá las cuevas debajo del río

Foto: ODIN

Las cuevas forman parte de nuestra historia y también de nuestra vida en la actualidad. ¿Quién no ha bailado o no conoce los pubs de la plaza Baix la Ploma y l'Almàssera? Antiguamente, las cuevas eran asentamientos originarios de poblaciones y también de barrios. En el caso que nos ocupa, las de la Alfarería, están documentadas desde principios del siglo XVII.

Recogen las informaciones históricas municipales, que este barrio debe probablemente su nombre a la existencia de un antiguo horno de alfarero, situado en unas cuevas muy próximas al Pont Vell. “Su implantación se debe a la iniciativa de un forastero, según consta en un acta de resolución aprobada en una reunión del consejo municipal de fecha 22 de noviembre de 1615. En la citada acta aparece la propuesta de construir un 'Horno o Alfarería ' en el lugar denominado 'las cuevas de debajo del puente', paraje muy próximo a la actual calle de la Cantereria”.

El interés patrimonial despertado en los últimos años está vehiculándose en las redes sociales. En uno de los grupos públicos de referencia en Facebook 'Plataforma por la defensa del patrimonio de Ontinyent' un vecino lanzaba una pregunta: “El proyecto de parque inundable de la Alfarería ha tenido en cuenta el patrimonio escondido de la Alfarería o se producirá la misma ¿desgracia que en calle Sant Jaume?”.

La respuesta municipal a esta cuestión es que atender la recuperación de estas cuevas "no está contemplado en el proyecto, con independencia de que se pueda estudiar en el futuro". Uno no de momento, sin cerrar puertas a hacer valer patrimonialmente este espacio.

Cabe recordar que el Gobierno de Ontinyent, después de la DANA de 2019 y del temporal Glòria de 2020, se planteó derribar las casas del último tramo de la Alfarería y ha trabajado en esta intención desde entonces, principalmente de la mano del vicepresidente del Consejo y Consejero de Vivienda y Arquitectura Bioclimática, Rubén Martínez Dalmau. La intención es hacer un parque inundable de características parecidas a las que ya se ha habilitado en las proximidades del Molí Descals, justo al otro lado del Clariano. Para ello el consistorio ha ido adquiriendo las casas de esta zona y se invertirán cerca de tres millones de euros en los próximos años.

Las cuevas en cuestión quedaron a la vista en el año 2001, cuando el Ayuntamiento de Ontinyent derribó unas viviendas de la Alfarería, que estaban en mal estado a petición vecinal y que estaban situadas justo frente al talud que salva el desnivel entre el Tirador y el río. La decisión municipal consistió en tapiar el acceso a ese espacio. Como recogía la noticia de este período, a principios del siglo XXI las cuevas contenían suciedad porque los habitantes de las casas que las cubrían en algunos casos las habían gastado como trastero, para acumular desechos. Sin embargo, el entorno se quedó limpio de vegetación, situación que ha cambiado significativamente a lo largo de los últimos 20 años, como recogen las imágenes.

Cuando derriben los almacenes de la Cantereria, que tapan visualmente el acceso a estas cuevas, este ejemplo de patrimonio de los orígenes históricos del barrio ganarán protagonismo, porque frente a ellas ya no habrá ninguna construcción, tan sólo el parque inundable y el río . Una oportunidad para darles el protagonismo que merecen.