El transporte: la asignatura pendiente que limita al campus de Ontinyent


La Covid-19 ha pasado de curso y vuelve a ser una alumna más este año en las aulas. Sin embargo, volver a una normalidad en las clases es una prueba que va superándose con nota. “Este es el curso de la recuperación y la vuelta a la normalidad, aunque teniendo en cuenta ciertas medidas. Volvemos a tener 100% de aforo en las aulas. La presencialidad es muy importante, porque condiciona toda la metodología docente del profesorado”, asegura José Cantó, director del campus de Ontinyent de la Universidad de Valencia. Una entidad que cada vez ofrece más platos en el menú académico, como un posgrado.

Pero el campus tiene asignaturas pendientes. “Las conexiones de transporte son la asignatura pendiente que nos limita. Es nuestra reivindicación. Ontinyent y la comarca tienen un problema de comunicación con la capital e incluso con Xàtiva, que podría ser otro punto de unión. Es un tema de voluntad política y creer en esa vertebración del territorio. No puede que hoy en día un profesor o alumno pueda venir a primera hora a clase, pero no pueda volver porque no hay tren a última hora. Tampoco con el autobús. Es un problema grave”, sentencia José Cantó. Así, la idea de retener el talento en la ciudad se cumple literalmente, pero se debe conseguir con otros medios para que tenga un reflejo en la localidad, que ya comienza a alojarse en un ambiente de ciudad universitaria, dado que las cerca de 1.000 personas que se mueven en el campus tienen necesidades de restauración, vivienda o transporte. "Todo esto hace que la universidad sea un polo dinamizador de la vida en Ontinyent, lo que está revirtiendo en la vida del barrio y de la propia ciudad", subraya Cantó.