El traslado del matadero pendiente de estudio

Además de las viviendas de la calle Canterería, otro de los espacios que sufren las crecidas del río Clariano a su paso por Ontinyent es el matadero municipal, en el número 199. En este caso, la concesión de este espacio a la empresa adjudicataria del servicio finalizará dentro de siete años, según explican desde el consistorio.

Una vez finalice el contrato, el ayuntamiento estudiará su ubicación y si es pertinente trasladar la actividad a otra ubicación. Este traslado no sólo solucionaría los problemas ocasionados por las inundaciones, sino también otras cuestiones derivadas de su proximidad al casco urbano, como son los fuertes olores que causan molestias al vecindario más cercano.

 

ACUERDO PARA ADQUIRIR 35 DE LAS 40 VIVIENDAS

La conversión de parte de la calle Cantereria en un parque inundable es algo indiscutible. El Ayuntamiento de Ontinyent ha anunciado que ya han llegado a un acuerdo para adquirir 35 de las 40 viviendas a derribar, para evitar situaciones como las ocurridas el pasado mes de septiembre, cuando las fuertes lluvias causaron el desbordamiento del río Clariano y pusieron en peligro a los residentes de esa zona.

Ahora, el consistorio sigue realizando las gestiones para concluir esta adquisición y llegar un acuerdo con los propietarios de las cinco casas restantes. Según fuentes municipales se sigue negociando y si todavía no se ha llegado a una resolución, es por cuestiones económicas, puesto que el valor que los técnicos dan a estos inmuebles es limitado.

Todas las personas residentes en estas 40 viviendas recibirán ayuda municipal para reubicarse y “que nadie se quede descubierto”. En este sentido, ya han sido varios los vecinos que han abandonado sus domicilios en la Alfarería. Entre ellos, el consistorio facilitó una nueva residencia a 6 familias, que fueron alojadas en espacios municipales y en una casa propiedad de Cáritas.

Estas ubicaciones son temporales, mientras que se tramita un convenio entre CriteriaCaixa y la Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo (EVha), por el que el consistorio dispondrá de un mínimo de 27 viviendas, que podría aumentar hasta las 31, para darlas un uso social. Las seis familias, y cualquier residente de la Alfarería que se vaya a quedar sin hogar, tendrá prioridad a la hora de ocupar alguno de estos domicilios. Será la propia Entidad Valenciana de Vivienda y Suelo la que gestionará las solicitudes, siendo el procedimiento de concesión el mismo que el del parque público de vivienda