Los focos de la investigación de los envenenamientos de los perros apuntan a Pedro IV

Dos han sido las denuncias interpuestas en los últimos días en la Policía Nacional de Ontinyent por envenenamiento de perros. Así fue confirmado a este periódico tanto por la Policía Nacional como por el Seprona de la Guardia Civil, cuerpo que se hizo cargo de la investigación. Sin embargo, parece que estos dos no han sido los únicos casos. Desde el Seprona informaban de que, de las dos denuncias iniciales, uno de los perros había fallecido, mientras que el otro había logrado salvarse, después, aparentemente, haber estado en contacto con una sustancia tóxica. Pero según informaban desde Coronación Centro Veterinario, donde atendieron a dos de los casos, se habría producido otro envenenamiento que habría derivado lamentablemente en la muerte de otro perro. "Uno de ellos llegó prácticamente muerto, no se pudo hacer nada por él", explica uno de los veterinarios del centro.

Los síntomas de los perros se correspondían con los efectos derivados de la ingesta o contacto con algún tipo de veneno. Por ello, ya se han derivado diversas muestras en el Instituto de Medicina Legal de Valencia para determinar qué tipo de veneno ha sido utilizado y poder averiguar el modus operandi de la persona o personas implicadas. Del mismo modo, tampoco está claro, todavía, cómo ha llegado la sustancia tóxica al organismo de estos animales. “No parece que se deba a algo que han ingerido, porque los dueños de estos perros no han observado que comieran nada durante el paseo, que es cuando se produjo el envenenamiento. Podría haberse producido olfateando algo” declaran desde el centro veterinario.

La preocupación ha corrido como la pólvora a través de las redes sociales. No sólo entre aquellos que tienen mascotas a las que pasean, sino también entre las vecinas y vecinos que tienen pequeños hijos. Y es que todos los casos sospechosos de envenenamiento se han producido en las inmediaciones del parque Pere IV, donde se centra la investigación. Una zona muy transitada por niños pequeños, que podrían entrar en contacto, sin darse cuenta, con el veneno y verse afectados también por éste.

Colonias de gatos

A raíz de estas denuncias hechas públicas, la rumorología también ha hecho acto de presencia. Así, varios internautas comentaban que en otras zonas del Llombo y Sant Josep también se estaban produciendo casos similares. Pero según las distintas fuentes consultadas, no habría constancia de que esta situación se haya producido fuera del barrio de Sant Rafael.

Del mismo modo, se han realizado publicaciones en redes sociales asegurando que también se estaban envenenando a gatos en algunas de las colonias controladas que existen en Ontinyent. Algo que desde la Protectora de Animales del Valle de Albaida desmienten. "No hay ningún alimentador que nos haya comentado nada al respecto", declaran. Sin embargo, esta misma protectora ha comunicado que desde el Departamento de Medio Ambiente del Ayuntamiento piden que motivemos a la ciudadanía afectada por los envenenamientos a sus mascotas a que se dirijan a dependencias policiales e interpongan una denuncia. Del mismo modo, a “las personas que tengan cualquier tipo de información” y destacan que es “vital encontrar a la persona que ha cometido este delito y pague por tanto sufrimiento”.

Delito

No es la primera vez que ocurre una situación similar en Ontinyent. Según fuentes municipales, es algo que a veces está vinculado a “cuestiones personales entre vecinos. No por eso es menos grave”. Tal y como explican en la web especializada en derecho animal Deanimals, el artículo 336 del Código Penal regula como hecho delictivo el uso de veneno o cebos envenenados por cualquier persona que no esté autorizada para ello, “siempre que este veneno tenga en más una eficacia destructiva no selectiva”. Pero éste no sería el único delito cometido por el autor, sino que además estaría incurriendo en un delito de maltrato animal, tipificado en el artículo 337. El culpable podría enfrentarse a una condena de prisión.

La investigación del Seprona está en marcha, con la determinación de localizar al responsable y que cualquier persona o animal pueda disfrutar de nuestras calles, parques y zonas verdes con tranquilidad y seguridad.