El humorista, guionista y presentador de televisión valenciano Eugenio Alemán reúne a Ontinyent esta semana para presentar su última obra 'A nadie que le pase'. Un espectáculo que va más allá del monólogo convencional, siendo una comedia teatral con puerta abierta a la improvisación y donde los hombres valencianos juegan un papel principal. Concretamente, el espectáculo 'A nadie que le pase' llega al teatro Echegaray los días 21, 22 y 23 de abril con nada menos que cuatro sesiones. El Periòdic d’Ontinyent se ha puesto en contacto con el humorista para dar un repaso a su trayectoria y descubrir las claves de la nueva obra.
Alemán que se ha visitado en distintas ocasiones la capital del Valle de Albaida reconoce que tiene una conexión especial con sus gentes. “A pesar de ser de la Ribera Baixa y vosotros del Valle de Albaida, tenemos una conexión muy bestia. Creo que mi forma de contar las cosas conecta mucho con la gente de aquí”, explicaba hace unos días a este tabloide. Una de las cosas más llamativas de su llegada a Ontinyent es el despliegue que hace en la ciudad con cuatro sesiones repartidas en tres días: viernes 21 a las 20 horas, sábado 22, a las 18 horas ya las 20 horas, y domingo 23 a las 19 horas.
Sin embargo, esto tiene una explicación detrás. “A nadie que le pase” es un espectáculo en el que pretendemos darle al público lo mejor, hay proyecciones, hay vídeos, mucha iluminación y juego con el público, eso nos está obligando a ir a teatros de ciudades que tengan un mínimo de requisitos técnicos. Y esto está pasándonos en capitales de comarca, como es el caso de Ontinyent, que tiene un teatro bueno y de esta forma intentamos estar más días”, comentaba.
Aunque el espectáculo está guionizado, el humorista siempre encuentra el momento y el espacio para hacer al público partícipe de su espectáculo. Es en ese momento cuando la idiosincrasia de los pueblos que visita sale a luz y las risas se convierten en parte de la función. “Siempre tengo a alguien que me dice cosas y es la parte que cambia del espectáculo, según en el pueblo al que voy. Pero no la tengo todavía [ríe]. Sin embargo, ya tengo mucha información de haber estado allí por Ontinyent y Vall d'Albaida. Es algo que me gusta hacer porque cuando veo que toque algo del pueblo y ves cómo lo celebra la gente es muy gratificante”.
Uno de los aspectos que también llama la atención en la trayectoria del humorista es que a pesar de ser una de las caras más conocidas de la televisión autonómica À Punt, decidió dejar atrás esta etapa para centrarse en su nuevo espectáculo. “A mí me gustan mucho los desafíos y yo estaba À Punt haciendo el 'Atráeme si puedes', pero también tenía que preparar el nuevo espectáculo y en las sesiones de grabación del programa apenas podía prepararlo. Decidí que lo dejaba para centrarme en la nueva función, hacía diez años que hacía 'En persona gane' por todos los pueblos y quería regalarle a la gente, de algún modo, un espectáculo que fuera original, ingenioso, y que no fuera el de siempre. Al final el espectáculo dura 100 minutos y la gente siempre después me dice: 'Me ha pasado volando' y eso creo que es lo mejor que te puede decir el público”.
El humor de Eugeni Alemany arraigado en el territorio valenciano, tiene mucho que ver con la forma de interrelación que tiene la sociedad valenciana. Así pues, en lo referente a la posibilidad de caer con tópicos y falacias repetidas, Alemany está claro: “Si eres valenciano vas a hacer humor de cosas valencianas, lo absurdo es que seas valenciano y pretendas hacer humor al estilo inglés, lo veo más forzado esto que a la inversa, incluso más pretencioso. Yo creo que si hace gracia da igual, yo a veces hago humor negro, a veces sátira política, otras veces humor costumbrista. En mi espectáculo tengo burradas que tocan un poco todos los rollos. Pero creo que el humor siempre es sano y mientras sea divertido habrá humor para todos”.