Biar se ha quedado sin pólvora para sus fiestas y, como esta población, otras que tienen festejos de forma inminente como Ibi, Muro de Alcoy y Petrer, entre otros. Una circunstancia que ha hecho saltar las alarmas en municipios como Ontinyent, porque la situación producida podría repetirse en un futuro, puesto que la capital del Valle de Albaida depende del mismo polvorín. Según explica el presidente de la Sociedad de Festeros, Vicent Pla Vaello, “han atribuido al mal estado de una partida de pólvora de la empresa suministradora, la carencia de este material en el polvorín de la población de la que dependemos en esta zona, en Montealegre del Castillo. El problema ha venido cuando no hay más pólvora para llegar a tantas poblaciones de forma inminente”. De hecho, los 23 kg de pólvora que habían, se han destinado a Villena para que pueda recibir a Mahoma, el 12 de mayo.
La problemática de la pólvora es un hecho que preocupa a Ontinyent y otros municipios, “mucho antes de que se produjera este incidente, de hecho, las poblaciones que no estamos en la Undef nos unimos en la plataforma 'Los pueblos de la pólvora' y trataremos lo que ha pasado y trabajaremos en la búsqueda de soluciones en un futuro. Por tanto, esta problemática puede beneficiar finalmente a las fiestas posteriores, porque hay que poner el foco no sólo en los festeros, sino también en el suministro de este material, que está monopolizado en una sola empresa”, añade Vicent Pla.
En el caso de Ontinyent, la pólvora se solicitará a finales del mes de junio y por primera vez se aplicará la nueva normativa, que obliga a identificar el disparador, el arma y la trazabilidad de la pólvora. En las fiestas morocristianas de la capital del Valle de Albaida existe una demanda aproximada por edición de 300 kg de este material explosivo. Por el volumen se podrá hacer el reparto como hasta ahora, en Santa Anna, la diferencia es que los festeros tendrán que introducir la pólvora en las cantimploras in situ y se sellarán para evitar manipulaciones posteriores. "Implicará más personas y más tiempo a la hora de hacer el reparto de pólvora", añade Pla.