Hace 25 años se propuso partir la Entrada de Ontinyent

Era 1999 y por estas fechas de principios de año, Manuel Penadés llegaba a la presidencia de la Sociedad de Festeros en sustitución de Vicent Micó. Se evitaba que la institución fuese a un proceso de junta gestora. Penadés entró con fuerza y ​​planteando una revolución de ideas con muchos cambios que quería poner en marcha para las partidos de Moros i Cristians.

Aquella revolución de ideas que quiso aportar durante su presidencia tenía una parte nuclear: el cambio en el programa de actos. Y sobre todo un punto central: la Entrada. La propuesta, que nunca llegó a materializarse, planteaba la división de la Entrada en dos días: jueves y viernes. Según esa iniciativa, el jueves desfilarían seis comparsas cristianas, a partir de las 19 horas y otras seis del bando moro por la noche. En esta primera entrega de la Entrada participarían los boats de las Embajadas de la cruz y la media luna. Por su parte, el viernes, también a partir de las 19 horas, tomarían parte el resto de formaciones, otras doce comparsas (seis cristianas, por la tarde, y seis moras, por la noche). Para esta jornada se reservaba la participación de las dos Capitanías. Lo que se buscaba era que los desfiles resultaran más cortos y que el público no se cansara y que se generara así, además, tiempo para que la hostelería pudiera beneficiarse de la interacción de la fiesta y los visitantes que llegaron a Ontinyent por a disfrutar de los actos.

La división de la Entrada en dos días generaba el problema de qué hacer con los actos del jueves (Entrada de Bandas y Alardo). La propuesta de Manuel Penadés aportaba como solución trasladar estos actos al día anterior, el miércoles, respetando los mismos horarios. Es decir, las Fiestas de Ontinyent crecerían en un día respecto a su estructura.

Toda esa revolución fue planteándose a las comparsas y en asambleas donde, finalmente, no salió adelante. Eso sí, de ese tiempo ha quedado la supresión de la Calle Mayor en el itinerario del acto central de los Moros i Cristians. Desde hace 25 años, la Entrada utiliza como trayecto las avenidas del Almaig y Daniel Gil hasta la Plaza Mayor.