El grupo municipal de Compromís ha instado al gobierno municipal a proteger el empedrado de la Calle Sant Antoni. Los nacionalistas manifestaron su preocupación sobre la sustitución del pavimento actual.
Desde Compromís se recuerda que el adoquinado de la vía central del barrio de la Ermiteta cuenta con más de medio siglo de historia y que es una demanda generalizada. “Se están eliminando sistemáticamente los empedrados históricos de basalto para colocar adoquines o placas de hormigón por doquier. Desaparece así una técnica, una materialidad, una textura y, sobre todo, una característica propia de los sitios. Se impregna una imagen de homogeneidad industrializada que desperdicia la memoria de estos lugares y les da un carácter más impersonal”, expone la portavoz Sílvia Urenya quien añade que desde su grupo se cuestiona su idoneidad para Sant Antoni.
La propuesta se hace extensible a otras vías donde todavía queda este tipo de superficie. “Instamos al gobierno a proteger este empedrado y el resto de los que nos quedan y trasladar a la Oficina Técnica la voluntad de conservarlos. No con ningún criterio arqueológico, sino con motivos de funcionalidad, sostenibilidad y calidad urbana”. Añaden que, en el caso de Sant Antoni, esta demanda de protección no es óbice para que se mejore la calidad de la calle.