Javier Reig: "Lo que más le hace falta a la Purísima es gente joven"

Con apenas un 15% de participación en la asamblea del sábado 9 de abril, Javier Reig fue ratificado como nuevo presidente de la Purísima. Recibió 186 votos favorables y 31 en su contra. Ahora asume el reto de modernizar la entidad sin desvirtuar su tradición.

¿Cómo se logra la modernización de una institución como la Asociación de Fiestas de la Purísima sin desvirtuar la tradición a la que representa?

“Bueno, nosotros empezaremos a trabajar después de Pascua, que será cuando empecemos a desarrollar los puntos de nuestra idea para estos próximos años. Creo que lo que más falta le hace a la fiesta de la Purísima es que se le acerque más gente joven, que la viva desde dentro, que se implique. Debemos romper con el canon de que la fiesta patronal está exclusivamente dirigida a personas mayores. Hay que reducir esa distancia que se ha creado respecto a la gente joven”.

¿Y cuál es la fórmula para obtenerlo?

“Necesitaremos la implicación de las cuatro parroquias de la ciudad. Creo que será muy importante alcanzar ese acercamiento porque de la gente joven pueden salir ideas muy interesantes. Una de las propuestas que tenemos en mente es crear un tipo de actividad en las parroquias de forma trimestral”.

¿Puede ser un hándicap el proceso constante de laicismo en nuestra sociedad y del distanciamiento que existe, por lo general, entre la iglesia y las generaciones más jóvenes?

“En ámbitos generales es innegable ese proceso que se ha producido en las últimas décadas. Pero, en el ámbito local, creo que en Ontinyent todavía existen movimientos parroquiales de juniors y juveniles que están muy vivos y activos. Ésta es la gente a la que queremos atraer porque representan la continuidad y el futuro”.

Abundante en este concepto del distanciamiento. ¿Considera que se ha producido una separación progresiva entre la ciudadanía de Ontinyent y la Asociación de Fiestas de la Purísima?

“La devoción de Ontinyent por la Virgen es incuestionable. Incluso en el contexto de crisis de fe que puede existir a nivel general, la relación de los ontinyentins con la Purísima es algo excepcional. Ahora bien, entiendo que debemos darle un impulso a la asociación”.

¿Le preocupa el hecho de que sólo acudieran a votar 225 de los 1.479 socios censados, lo que supone un 15%?

“Me preocupa y me duele. Pero creo que debemos fijarnos más en el objetivo de intentar recuperar una mayor masa social, sobre todo porque la asociación llegó a tener más de 2.000 socios no hace tantos años. Éste debe ser un reto: crecer. Y para eso es necesario motivar. E ilusionar. Deberemos trabajar intensamente e implicar a otras asociaciones de la ciudad, llegar a más sectores. Pero esto se logra saliendo. Ésta es la filosofía”.

¿Qué papel desempeñará su junta en la gestión de estos próximos tres años?

“Sinceramente, creo que hemos obtenido reunir a un buen equipo. Esto nos da tranquilidad para dar los próximos pasos a la cabeza. Contamos con la experiencia de gente que ya ha estado en anteriores juntas y conoce perfectamente el funcionamiento de la entidad. Y gente nueva que viene a aportar su granito de arena. Con ilusión creo que en estos tres años haremos cosas interesantes”.

Puedes leer la entrevista completa en la edición en papel del sábado 23 de abril.