Juan Ramón Ferrandis Bresó es ferroviario y trabaja desde hace cuatro años en la línea Xàtiva-Alcoi, aunque lleva 34 ferroviario. Toda esta experiencia le ha plasmado en una exposición que se puede visitar hasta el 2 de febrero, en el Centro Cultural Caixa Ontinyent. Sobre la exposición, explica “es la que abrió el centenario de la estación del Norte de Valencia en 2017. Desde ese momento ha sido itinerante y Ontinyent es la ciudad que lleva 20 donde se exhibirá. La muestra quiere retratar y reivindicar el ferrocarril dentro de un ámbito social y sostenible, un ferrocarril público, social, seguro, accesible, sostenible y de calidad. Además, es una perspectiva de una persona que está trabajando en el ferrocarril 34 años”.
Centrándose en la línea Xàtiva-Alcoi, Juan Ramón considera que está en “peligro”, ya que “las inversiones están destinadas en la mayoría de los casos a los trenes de alta velocidad. De hecho, estos últimos han abrumado el 71% de las inversiones en los últimos años, mientras que el convencional ha recibido tan sólo el 29%. Por tanto en la exposición y en las charlas que hagamos pido una reestructuración: que las inversiones se destinan a quien más utiliza el tren y el convencional lo utiliza el 96% de los usuarios, mientras que el alta velocitante la utiliza el 3,8, 35% de los usuarios. En el caso de la línea Xàtiva-Alcoi tiene desde hace XNUMX años la espada de Damocles del posible cierre, su deterioro progresivo, el mal servicio y las comarcas como éstas están luchando por mantener este servicio”.
A esta cuestión se suma la anunciada recientemente del cierre de 150 taquillas que afecta a la de Ontinyent, algo que ” lo denunciamos rápidamente, porque se han quedado el 80% de las estaciones sin poder vender billetes, sin prestar atención y sin que los usuarios puedan curarse de la lluvia, pero parece que tanto Renfe y Adif como el Ministerio de Fomento estaban decididos a hacerlo así, pero todavía no es tarde. De hecho, aprovechando que estaba en el aire la formación del Gobierno de España, algunos partidos se han preocupado, porque impulsar este servicio estaba dentro de sus reivindicaciones y de su programa, para mantener a la España despejada de una forma más digna y evitar la pérdida de viajeros en zonas rurales”.
Otro de los aspectos que ha sufrido la línea Xàtiva-Alcoi es cuando se produce una baja de conductor en tiempo real, es decir, el mismo día, se queda sin servicio, “efectivamente, es la carencia de personal. Entiendo que una empresa pública como Renfe y Adif con más de 30.000 empleados, de forma conjunta, debería tener a varias personas de reserva para hacer frente a estas incidencias. Es intolerable que por estos motivos se supriman trenes”.
En los últimos tiempos se han anunciado inversiones y también se han realizado actuaciones en la línea lo que se ha notado en la seguridades, pero “el problema es que estas mejoras no se han trasladado a la ciudadanía: no se ha notado una mejora del tiempo, tan sólo se ha podido recortar el trayecto entre 5 y 6 minutos, ni el baqueteo, que sigue siendo el mismo. Desde Alcoi-Ontinyent-València, hay un tramo de siete horas que no pasa ningún tren y es fácilmente enmendable, porque hay un tren que se queda en Xàtiva desde las 10.04 a las 13.20 que podría hacer al menos un viaje a Alcoy de ida y vuelta o incluso dos. Por tanto, creo que es una cuestión de voluntad política que haya más servicio”.