El cauce del río se encuentra en estos momentos en obras, debido a todos los trabajos que están teniendo lugar en este entorno, principalmente los del colector de aguas residuales. Producto de esta situación es que existen escombros y también troncos y ramas de árboles, que han desatado la alarma en el vecindario de la Alfarería. Los vecinos han alertado al Ayuntamiento de Ontinyent sobre esta circunstancia que se produce "desde hace meses", sobre todo teniendo en cuenta que se pueden producir lluvias torrenciales, con la amenaza que esto significa para esta calle junto al río Clariano. Al mismo tiempo, también preocupa que las perforaciones realizadas supongan un peligro para alguna persona que pueda pasar por esta zona. La problemática se trasladó al Ayuntamiento de Ontinyent y fuentes municipales explican que “la empresa está acabando de montar el inca, es decir, la perforación subterránea a la altura de Tortosa y Delgado, de hecho, ayer estaban procediendo al desmontaje de todo esto y, a continuación, iban a realizar limpieza general del camino paralelo a la cama y la retirada del material que la empresa tiene allí”. En cuanto a los plazos, en julio se anunció que la compleja obra del colector terminaría a finales de este año o principios de 2023, por lo que todavía se está dentro del tiempo previsto. Además, desde el consistorio aseguran que "la Confederación Hidrográfica del Júcar es quien tiene la competencia en el lecho del río y vigilará porque no quedan restos de obra".
La Asociación Vecinal Sant Rafel, donde se incluye el vecindario de la calle Cantereria, está siguiendo este tema y ya ha mantenido una reunión con el consistorio ontinyentí al respecto.