La primera árbitra internacional valenciana es valldalbaidina

Con tan sólo 25 años, Rita Cabañero, natural de La Pobla del Duc, es la primera colegiada valenciana que ha conseguido ser internacional en la historia del Comité Técnico de Árbritos autonómico.

La valldalbaidina tiene desde mediados de diciembre de 2018, la escarapela FIFA, distinción que acredita para poder silbar en competiciones a nivel internacional. Así que ya se alterna con la cantera de profesionales más reconocidos del arbitraje español. Su debut como árbitra asistente internacional llegó en enero, en el partido amistoso de selecciones absolutas disputado por Noruega y Escocia, en la Manga del Mar Menor. “Conseguir la internacionalidad siempre ha sido el mayor sueño que he podido tener y ahora hay que seguir trabajando para mantenerlo y para disfrutar de cada partido y experiencia”, cuenta. Esta faceta internacional la compagina con la nacional, silbando a partidos de la Liga Iberdrola de fútbol femenino y en la Tercera División valenciana como asistente.

Su trayectoria como árbitra empezó pronto, a los 18 años. Siempre le había gustado el fútbol y en su casa ha estado muy presente. “Siempre me ha gustado ir a ver partidos y una vez me fijé en el árbitro, porque era jovencito y pese a los comentarios del público, seguía ejerciendo su labor. Me entró curiosidad por cómo podría hacer esto. Nunca había pensado en cómo se llegaba a ser árbitro, pero cuando llegué a la universidad y vi un cartel de curso de árbitros de fútbol no dudé en hacerlo y probarlo. Cuando terminé el curso y pasé las pruebas físicas y los exámenes técnicos empecé a arbitrar fútbol base. Estuve varios años, hasta que empecé con segunda regional y primera”.

Aunque el arbitraje sea un sector con más hombres que mujeres, Rita asegura que, "tanto mujeres como hombres tenemos todas las mismas oportunidades y tenemos siempre el apoyo del Comité Técnico de Árbitros (CTA) y del resto de compañeros". Cuando sale al campo, lo primero que piensa es en estar concentrada “pensando en acertar lo máximo posible para que toda la gente, tanto equipos como espectadores, puedan disfrutar del buen fútbol”.

El tiempo que le deja el arbitraje, esta joven lo aprovecha para estudiar, "me quiero preparar oposiciones para trabajar de profesora de Educación Física".