La programación de la Unidad de Igualdad, la mejor arma para combatir las violencias machistas

Hoy se ha presentado en la Mancomunidad de Municipios del Valle de Albaida la programación diversa y completa de la Unidad de Igualdad con el objetivo de contribuir a erradicar las desigualdades de género. Un programa que ha iniciado su curso en los municipios de la comarca. La primera actividad organizada es la Escuela de Empoderamiento, que cuenta con 12 sesiones, 10 de las cuales serán impartidas por la formadora Araceli Caballero. Esta actividad aportará recursos de atención y acompañamiento a las mujeres víctimas de violencia machista. “Nunca se borrará la situación vivida, pero sí se puede aprender a manejar las emociones. Se trata de que recuerdan que ya tienen muchas de las habilidades necesarias para ello. Sólo deben aprender cómo usarlas. Por eso, nos centramos en la mejora de las relaciones en tres ámbitos: el personal, para erradicar el sentimiento de culpabilidad; el relacional, en cuanto a cómo es la relación con la familia o los más cercanos, y el social, por la violencia estructural que viene del sistema y dificulta el hecho de denunciar tanto jurídica como socialmente. Gestionar estos tres pilares es la base del empoderamiento”, recuerda Caballero. Las dos últimas sesiones se centrarán en la alfabetización digital para dotarlas de independencia. Otro proyecto del programa es un taller dirigido a jóvenes de los centros educativos, que va desde noviembre hasta el final de curso y que cuenta con 4 sesiones. El objetivo es reflexionar sobre cómo ven las relaciones afectivas y sexuales para observar cómo les afecta una falta de educación en este ámbito y cómo se informan sobre ellas a través de la pornografía.

"Queremos poner en marcha políticas de igualdad transversales, integrales y potentes, capaces de cambiar las realidades donde hay desigualdades", subraya Paula García, agente de Igualdad. Actualmente, se está realizando el seguimiento de más de 80 expedientes causados ​​por diferentes tipos de violencias machistas en la comarca. El propósito es ayudarlas a que puedan llevar una vida digna y que abandonen 'esos círculos de violencia', destaca García. Para ello, necesitan un incremento de los recursos destinados a la protección de las problemáticas asociadas a las violencias machistas. Pero también a la sensibilización de la ciudadanía sobre este tema para “echar a los mitos que dicen que estas cosas no ocurren en nuestros pueblos”, destaca el agente de Igualdad. Desgraciadamente, sí ocurren en todos los municipios. “Tenemos un número bastante alarmante de esos casos. Pero sólo en uno, sería suficiente para intervenir porque significa que una persona no puede desarrollar sus derechos en condiciones de igualdad con respecto a otra”, enfatiza. Para hacer frente a estas problemáticas, se han destinado en los municipios de la comarca cerca de 210.000 euros dirigidos a realizar escuelas de empoderamiento, políticas de igualdad y asesoramiento jurídico y psicológico para mujeres en situación de maltrato o que sean supervivientes de éste. Entre estas acciones, destaca el deseo de contratar a personal especializado. García expone que es sobre todo en las localidades más pequeñas donde más cuesta salir de la “espiral de violencia” por vergüenza o temor al “qué dirán” o, incluso, a darse cuenta de que se está viviendo la violencia en primera persona. Este año sus actividades cuentan con una mayor participación de mujeres, aunque recuerdan que la responsabilidad es de toda la sociedad.