El proyecto de reforma de la CV-60, la carretera comarcal que une las comarcas de Vall d'Albaida y Safor será una obra de envergadura, una infraestructura cuyo presupuesto rondará los 60 millones de euros. La necesidad de desdoblar la carretera y convertirla en autovía es urgente, sobre todo a partir de las víctimas mortales que se van registrando. La última, la de la semana pasada en la que murió un joven de Montaverner de 27 años ya eleva a cuatro los fallecidos del último año.
Pero la complejidad de las obras radica en el lento proceso administrativo y también en una oposición que ha surgido, fundamentalmente, en la parte que afecta a la comarca de la Safor. En cuanto al proceso administrativo, por el momento, ya se ha redactado el proyecto básico y ya se ha tramitado la evaluación ambiental. En los próximos meses le licitará el proyecto de obra, una redacción técnica que, una vez adjudicada, puede demorarse hasta un año. Se calcula que, prácticamente todo el año 2023 se dedicará a este trabajo, por tanto el inicio de la ansiada reforma no llegaría, como mínimo, hasta bien entrado el año 2024, en el mejor de los casos. La obra deberá contemplar la reforma de un trazado de 24 kilómetros.
El tramo que afecta al Valle de Albaida, entre L'Olleria y Terrateig, parece que tendrá más facilidades porque ya cuenta con la declaración de impacto ambiental. No es el caso del tramo que afecta a la Safor donde ha salido una oposición por parte de algunos municipios contrarios a los efectos que la nueva carretera tendrá sobre las huertas y campos de algunos pueblos. En este sentido se han presentado alegaciones que, en estos momentos, se tendrán que resolver y que por tanto podrían tener una incidencia sobre esta parte del proyecto de desdoblamiento.