Al menos desde hace un mes, el montón que cierra el paso de vehículos a la calle Sant Antoni está descargado. Una circunstancia que el vecindario critica porque, en su mayoría, quieren que sea una vía lo más peatonal posible. Ahora pasan más coches ya gran velocidad, sostienen los vecinos.
Entre el vecindario de la calle Sant Antoni hay malestar y preocupación. La misión de este elemento urbanístico era que esta calle dejara de ser un conducto rápido que conecte el barrio de Sant Josep con el Poble Nou y el Llombo y según apuntan los residentes, “se había conseguido controlar la bajada de vehículos de paso y habíamos ganado en tranquilidad y en calidad de vida”. El resultado hoy en día es que "pasan muchos más vehículos y lo hacen a una velocidad muy por encima de lo permitido, por lo que se ha retrocedido", añaden varios residentes del barrio.
Una situación que se agrava especialmente en lo alto, ya que la integridad de las personas que entran y saliendo del establecimiento de la peluquería, en varias ocasiones se ha encontrado amenazada por la velocidad tan elevada a la que entran los coches por el calle "y al no existir aceras, es un peligro, ya que alguna vez han frenado en seco ya sobre los peatones", explican testigos que así lo han visto. La Asociación Vecinal del Poble Nou se reunió con el gobierno municipal y la explicación que aportan desde el Ayuntamiento de Ontinyent es que "se trata de una incidencia, porque se rompió y falta una pieza que no llega". Una contestación que no satisface a la entidad vecinal, ya que entienden que hay otros elementos, como las vallas, para cortar el tráfico.
Otro de los hechos que ha llamado la atención al vecindario ha sido la eliminación de una placa que había al principio de la calle, donde se indicaba que era una "zona de prioridad de peatones". Por el momento, no se sabe si se retiró por error o el motivo real de su desaparición. Desde la Asociación Vecinal del Poble Nou han explicado que el consistorio ha instalado unas cámaras para, en un futuro, poder sancionar a todos aquellos que estacionan y no sean vecinos. Quienes prefieren que pasen los coches y que no se repita “la muerte que vivió la calle Mayor a partir de su zona peatonal” se han convertido en una minoría. El concepto europeo de movilidad es una exigencia asumida por el vecindario que quiere que se ponga remedio al tráfico peligroso e intenso actual.