La tradición de las inocentadas del día 28 de diciembre va evolucionando y adaptándose a los nuevos tiempos. Si en los orígenes hacer bromas podía manifestarse con una silueta de papel pegada a la espalda, hoy en día las inocentadas se van sofisticando en forma y presentación. Y uno de sus canales de transmisión, como no podía ser de otra forma, son las redes sociales.
Ayer jueves 28 de diciembre encontramos en el ámbito digital de proximidad diferentes informaciones que en mayor o menor exageración nos dejaban ver que se trataba de inocentadas. Algunas de las más destacadas:
Cesc Biosca se lo curró. Lo hizo con una imagen algo esperpéntica pero elegante y graciosa (la que encabeza esta información). Se trataba de la vía del tren atravesando el barrio de la Vila. En el grupo de Ontinyent Rural publicó que ante la noticia de la posible instalación de la estación de tren en Mesta, unas excavaciones arqueológicas habían dejado en evidencia que, antiguamente, el tren pasaba por la Villa.
El Club de Tenis Helios afinaba en lo que debe ser una inocentada, con un punto intermedio de verdad y mentira que deben hacer dudar al lector. Aseguraban que Carlos Alcaraz formará pareja con Juan Carlos Ferrero en los Juegos Olímpicos de París de 2024, según había adelantado el Comité Olímpico Español a través de la Real Federación Española de Tenis.
Desde el Ontinyent 1931 CF también se acercaba a una información que, al menos, resultaba verosímil al comunicar que el ex colegiado internacional Mateu Lahoz se incorporaría como nuevo miembro de la junta directiva del club con el objetivo de tener más controlados los arbitrajes. Eso sí, una segunda inocentada, ya se pasaba un poco con un montaje fotográfico de Juanma Bas y Florentino Pérez aunque asegurando que el Ontinyent jugaría la Superliga europea, tras el acuerdo de ambos presidentes. Además, el club del Clariano iba a recibir 1.000 millones de euros para fichar a Mbappé que formaría ataque con Cobo y Cambreta.
El Colegio La ConcepciónA pesar del paro docente de esta semana, informaba que el centro abriría sus puertas en el año nuevo convertido en un parque acuático con toboganes de agua y la mayor piscina de oleadas de toda la Avenida Sant Francesc. Además, los profesores vigilarían las atracciones.