Desde junio y hasta este viernes 19 de agosto, el ritmo de altas de nuevos socios de Festers procedentes de las comparsas no ha parado. Hasta 232 nuevos componentes se han inscrito en estos dos últimos meses. A falta de cerrar las liquidaciones, algo que muchas comparsas harán efectivo durante la primera parte de esta Semana Grande, la principal conclusión que se extrae es que el ritmo de altas es muy superior al de bajas. Tanto que, la masa social con la que cuenta la Sociedad de Festeros se ha situado en el punto más álgido de su historia con un total de 4.794 socios.
Al contrario de lo que cabría esperar ni la pandemia ni la crisis económica han hecho mella en la masa social festera durante estos años. Desde algunas de las comparsas se apunta que, tal vez, se puede empezar a notar una disminución de renovaciones en las cuotas o una cierta fuga a partir de la próxima Cruza de septiembre, pero en todo caso los festeros han aguantado el pago de sus compromisos hasta este año. Las ganas por celebrar y vivir los Moros i Cristians, almacenadas desde 2019, han pesado mucho más que las condiciones económicas.
15.000 personas
Esa predisposición a tomar parte en las Fiestas de 2022 cristaliza, fundamentalmente, en el acto central de nuestras Fiestas, la Entrada. Según las estimaciones de la propia Sociedad de Festeros, se calcula que este año tomarán parte en la Entrada cerca de 15.000 personas. En esta cifra hay que agregar tanto a los componentes de las comparsas del bando moro y cristiano como a los grupos musicales, ballets y figurantes que se integrarán de los ballets.
reto
Esta cifra constituye, además, todo un reto para la organización del desfile. El mayor número de participantes suele derivar en una dilación de los tiempos en los que transcurren tanto la Entrada cristiana de la tarde como la mora de la noche. Cabe recordar que en 2019 ya se apreció un incremento de participantes que incidió directamente en que sólo existiera una franja de media hora de separación entre el final de la Entrada cristiana a las 21.30 horas y el inicio de la Capitanía mora que empezó a salir a las 22 horas.
Según el reglamento que regula el desfile, cada comparsa tiene un tiempo estimado de paso de cinco minutos por cada grupo musical que les acompaña, con un límite máximo de diez grupos musicales. Se estima, por tanto, que las comparsas con mayor puesta en escena de efectivos tienen un tiempo de paso de 50 minutos. Además, según el cálculo del itinerario, se tardan cerca de 55 minutos desde el inicio en la avenida del Almaig hasta el final en la Plaza Concepción. La organización del desfile recae, principalmente, en los dos responsables por grupo musical de los que debe disponer cada comparsa. Además, la junta de gobierno se distribuye a lo largo del recorrido.
Sin embargo, esta semana se celebrará una reunión con los representantes de las comparsas para abordar los últimos detalles. El objetivo principal que se ha marcado Festers es “un retorno digno” y se trabajará para conseguir la mayor fluidez en el desfile central.