Durante muchos años el patrimonio ha sido uno de los grandes olvidados por la cantidad presupuestaria tan elevada que requiere su recuperación y puesta en valor. Pero cuando se da un impulso a espacios o inmuebles, que forman parte de la huella que la historia ha dejado en la ciudad y ésta cobra más sentido y gana en calidad, en atractivo turístico y patrimonial.
El jueves se escogían los diez proyectos que se votarán en el programa 'Ontinyent Participa' que incluye dos piezas claves del patrimonio ontinyentí que puede priorizar a la ciudadanía con sus votos: la restauración del 'arco y el horno del Cucó' en el barrio de la Vila, que data del siglo XIV y que sumaría un nuevo atractivo en la calle Trinitat, y una nueva fase de rehabilitación de la Casa del Marqués de Montemira, que requiere seguir sumando actuaciones, para preservar lo poco que de ella ha ido quedando.
Entre las propuestas más singulares en el decálogo de la participación ciudadana, llama la atención un parque de barras en el que practicar la calistenia, una modalidad deportiva que entrena las capacidades físicas utilizando el peso corporal.
Mejorar los servicios que presta la ciudad, también se encuentra entre las prioridades ciudadanas, así, del 5 al 9 de noviembre, los ontinyentins podrán optar también por sustituir el tejado del mercado municipal; dotar a la ciudad de nuevos carriles bici; la reubicación de la parada de autobús y taxi y todo un clásico que se reitera año tras año por su necesidad: el proyecto para la mejora del acceso de peatones a la estación de tren y al cementerio.
El resto de iniciativas propuestas por la ciudadanía son urbanizaciones en diferentes calles de la ciudad, bien ampliación de aceras (C/ San José; Salvador Tormo y José Iranzo), bien la reurbanización integral (Ramón Llin, Padre Fullana y Llop de Bailó) .
Esta es la lista que surgía finalmente y las propuestas las defenderán públicamente quienes las efectuaron en su día, hoy, 31 de octubre, a las 19,30 horas, en el CIM de Sant Rafel.