Ontinyent plantea crear una línea de ayudas para abaratar el despliegue de la fibra en el centro histórico

El Ayuntamiento de Ontinyent ha anunciado esta mañana en rueda de prensa que estudiará crear una línea de subvención para facilitar el despliegue de la fibra óptica en La Vila y en los inmuebles con fachada protegida del Poble Nou. Así lo han explicado el concejal de Territori Juan Sanchis (El Valle nos Une) y Paco Penadés, concejal de Alumbrado (Partido Popular), que han trabajado de forma conjunta para buscar una posible solución a una de las demandas más extensas por parte del movimiento vecinal de estos barrios.

Sin embargo, se trata de un problema complejo. El despliegue de la fibra óptica en el Poble Nou y La Vila continúa obstaculizado por el choque de la ley estatal de Telecomunicaciones (favorable al despliegue) y la de Patrimonio de la Comunidad Valenciana que es “enormemente restrictiva” ha comentado Joan.

“Desde que empezó esta problemática se puso en marcha estudiar una modificación del PRI (Plan de Reforma Integral), para favorecer el despliegue de la fibra en estos barrios, pero una reforma del planeamiento de un espacio en protección tiene sus tiempos y, sobre todo, debe pasar por la Generalitat Valenciana”, ha detallado Juan.

En este sentido, mientras el Ayuntamiento sigue trabajando por la modificación del PRI, se pretende dar dos soluciones. Tras un estudio muy detallado de la actual normativa y las aportaciones de la oficina técnica, los criterios que mantiene el ayuntamiento son los siguientes:

pueblo Nuevo

Las compañías interesadas en instalar la fibra óptica lo podrán hacer utilizando las canalizaciones subterráneas ya existentes, pero allí donde no exista canalización externa, o sea económica o técnicamente inviable, se permitirá el trazado aéreo de la fibra en el inmueble, que es "prácticamente en todo el Poble Nou", ha comentado Joan. Sin embargo, en cuanto a los inmuebles que sean BIC (Bien de Interés Cultural), de relevancia local o de protección integral, el consistorio facilitará una serie de ayudas económicas para costear la instalación subterránea.

La Villa

En el caso de la Vila, al ser conjunto histórico-artístico, exige que esta instalación sea subterránea. Por tanto, exista o no trazado aéreo las canalizaciones deben ser subterráneas. Aún así, el ayuntamiento "siempre que hace cualquier reurbanización de la calle instala canalizaciones subterráneas", ha comentado Joan. De este modo, según las estimaciones de ambos concejales sólo habría afectados entre 30-50 inmuebles que sí necesitarías ramificaciones del canal subterráneo principal para que llegue la fibra a la casa, por lo que se encarece la instalación.

Hay que tener en cuenta, que estos criteros de interpretación por por del ayuntamiento deben ser evaluados por la Comisión del Patrimonio para después ser aprobados en pleno.

Hasta el momento no se había presentado ningún proyecto de despliegue de fibra óptica, pero después de las gestiones y cooperación de las dos concejalías hay dos compañías interesadas. “Esta no es una solución que llegará mañana o después mañana, pero lo importante es que ya hemos hablado en algunas empresas. El hecho de tener empresas preparadas significa que en los próximos meses podamos tendremos fibra desplegada en el núcleo histórico”, avanzaba Paco Penadés.