Uno de los gastos fijos del hogar que más preocupan son las facturas de la luz, ya que cada vez son más altos ya veces pagar ese importe dificulta llegar a fin de mes. Como no podemos dejar de usar la electricidad, lo mejor es que adoptemos una serie de mesures que pueden disminuir esa factura mensual.
Estas recomendaciones no requieren grandes sacrificios, tan sólo cambiar algo algunos de nuestros hábitos, pero valdrá la pena y lo notaremos en la cuenta bancaria. Revisa tu tarifa. Elige bien la compañía con la que contratas el suministro. Es necesario valorar qué necesidades energéticas tienes en la vivienda y elegir una tarifa que se adapte a ellas.
Utiliza electrodomésticos más eficientes. A la hora de renovar los electrodomésticos fíjate que disponen de etiquetas energéticas eficientes: A+, A++. A++, así sabrás que su uso consume hasta un 40% menos de electricidad. Aunque este tipo de electrodomésticos tienen un importe superior, este gasto se amortiza en las siguientes facturas de la luz, por lo que es una compra inteligente.
Elige la temperatura adecuada. La climatización del hogar es uno de los elementos que más electricidad consume, por eso no es necesario pasarse ni en invierno ni en verano. Lo ideal es que dentro de la vivienda la temperatura oscile entre los 20-23 grados de día y los 15-17 durante la noche.
Utiliza bombillas de bajo consumo. Las bombillas de bajo consumo como las LED ahorran entre un 50 y un 80% de energía sin perder un ápice de luminosidad. Aunque el importe es superior a su rentabilidad se nota a medio plazo, ya que duran más que las bombillas tradicionales. Buen uso de los electrodomésticos. Además de que sean eficientes también es importante que los electrodomésticos se utilicen correctamente. Acostúmbrate a cargar por completo la lavadora y el lavavajillas ya utilizar programas eco que consumen menos luz y agua.