Septiembre deja un descenso de 244 parados en Vall d'Albaida

Según las cifras publicadas por el SERVEF, el paro registrado en el mes de septiembre 2022 en la Valle de Albaida es de 5.488 parados, es decir, hay 244 parados menos que en el mes anterior y 886 menos que en 2021, es decir, un descenso mensual de 4,26% y una disminución anual de 13,90%.

En cuanto a la contratación, se ha registrado 2.728 contratos en septiembre de 2022, lo que ha supuesto 793 contratos menos que en 2021 es decir un 22,52% de disminución interanual. Por géneros, 1.179 fueron a mujeres (43,22%) y 1549 a hombres (56,78%). La contratación indefinida mensual es de 1.571 contratos (57,59%) y la contratación temporal es de 1.029 contratos lo que significa un 37,72%. Respecto a 2021, la indefinida aumenta en un 304,90% y la temporal disminuye en 2.104 contratos, un 67,16%. Los contratos a tiempo parcial son un 47,76% respecto a los de jornada completa, un 52,24%.

Los datos del paro del mes de septiembre han registrado una reducción del número de personas en desempleo, reflejando la estacionalidad propia de un mes marcado por la transición del fin de la campaña de verano y el inicio de las actividades propias del invierno en el sector educativo, público y agrícola.

Para Raül Roselló, secretario general Comarcal de UGT-PV, “los datos conocidos muestran una fortaleza relevante del mercado laboral, a pesar del incierto contexto político internacional en el que nos encontramos. En suma, sigue avanzando en la creación de empleo de calidad, en tanto los contratos indefinidos suponen un 49,12% en la Costera, un 57,59% en el Valle y un 19,17% en la Canal, del total de contratos firmados, cumpliendo así el objetivo de la reforma laboral de acabar con la excesiva temporalidad predominante en nuestro mercado laboral”.

Sin embargo, Roselló considera que “pese a la mejora de las condiciones laborales, la situación socioeconómica de las personas trabajadoras sigue viéndose muy resentida a consecuencia de los efectos de la guerra de Ucrania sobre la capacidad adquisitiva de los hogares. Las altas tasas de inflación, el aumento de los tipos de interés, y las moderadísimas subidas salariales, se combinan para hacer a la clase trabajadora la principal víctima de la crisis internacional”.