Pendientes de la meteorología. Así es la vida de los agricultores y el cultivo del Melón de Oro de la ciudad no es una excepción. Este año, si desde ahora hasta la hora de la recolección no existe ningún cambio significativo, se espera una “buena campaña con una previsión de 15.000 kg, una cantidad muy similar a la del año pasado” , avanza la concejala de Sostenibilidad, Patrícia Folgueras.
La tormenta de hace unos días amenazó a los melones que ya están a las puertas de la cosecha. De ahí que algunos ejemplares sufrieron en su piel unas manchas. De hecho, en una reunión mantenida a tres bandas: Ayuntamiento de Ontinyent, Cooperativa y los productores de este preciado fruto, se ha planteado introducir una novedad este año, la comercialización también del Melón de Oro de 2ª categoría.
Para distinguir las dos categorías se han realizado dos adhesivos diferentes que identifican claramente qué tipo de melón está adquiriendo el consumidor. Según explica la concejala de Sostenibilidad “en la 2ª categoría entrarían aquellas prendas que son de menor tamaño o tienen alguna mancha en su piel”, y añade: “El año pasado de la producción de 15.000 kg, 2.000 se descartaron como Melón de Oro por no ser de 1a. Ahora se comercializarán con una etiqueta distinta, pero con la garantía de estar cultivado siguiendo unos criterios de calidad, desde la semilla, hasta el trabajo del campo, siguiendo las pautas tradicionales”. Dado que la meteorología ha acompañado, permite darle una estabilidad a la producción lo que es beneficioso para cumplir con los diversos compromisos comerciales, dentro y fuera de la capital del Valle de Albaida.
Está previsto que en las próximas semanas los puntos de venta habituales, con el cartel distintivo, y la Cooperativa Vinícola Onteniense empiecen a comercializar este fruto de piel dorada, carne blanca y dulce que tantos paladares ha seducido. Una puesta a la venta que se alarga unos días más que el año pasado, pero que ya está girando la esquina.