Esto ocurrió, hace exactamente 54 años. Fue un 15 de marzo de 1970. En ese momento elOntinyent CF (oficialmente aún se denominaba Onteniente CF) jugaba en Segunda División. Era la época más dorada del fútbol en nuestra ciudad. El equipo que entrenaba Vicent Morera disputaba un encuentro en el estadio Carlos Tartiere contra el Oviedo. Era un día de mucha lluvia y el campo era un auténtico barro.
Había en ese encuentro una curiosidad. Se enfrentaban cara a cara a dos hermanos, uno en cada equipo. El delantero del Real Oviedo Enrique Galán contra el portero del Ontinyent, Juan Galán. El partido terminó con la victoria mínima de los locales por 1-0. El gol de los asturianos lo lograba el delantar Sistiaga. Y aquí es donde se produce una imagen que ha terminado por ser histórica y al mismo tiempo emotiva, entrañable y que habla de valores que están por encima del resultado y de la competición. Al portero del Ontinyent se le escapó de las manos el balón que se convirtió en el único tanto del partido. Consciente de lo ocurrido rompió a llorar. Y fue su hermano quien se acercó para consolarle. Esta imagen de la publicación Asturias Semanas es el testimonio de una anécdota del fútbol que debe ser ejemplo.
En esa plantilla del Ontinyent el portero Juan Galán se disputaba la titularidad con el carismático Moreno. Otros jugadores destacados eran Bisbal, Mora, Figuerido, Bermúdez, Olivella, Diestro, Portalés, Úbeda, Sánchez Barrios… entre otros.