Vicent Bordera y Nacho Pastor, cuando la fiesta desemboca en una amistad y en la Embajada cristiana 2022

Ambos reconocen que no eran amigos íntimos, de los de cuadrilla. Sin embargo, fue la fiesta la que les unió. Es más, ahora son un tándem inseparable. Por delante tienen la preparación de un cargo tan relevante en los Moros i Cristians de Ontinyent como es la Embajada cristiana, no sólo en el diseño y desarrollo del alarde sino, también, en la declamación del texto de Cervino con el que se pondrá fin a los días grandes de agosto de 2023.

De cuna

Vicent Bordera es cruzado por nacimiento. Militó en la comparsa desde la infancia aunque hubo un paréntesis. Durante cinco años estuvo ausente, ya que se marchó al bando de la media luna, concretamente a la comparsa de chano. Aquel impasse concluiría con el regreso a la formación de la cruz. Desde allí han ido formando piña y atrayendo a amigos que se les han ido uniendo. A Vicent Bordera el cargo de Embajador le llega también con antecedentes familiares. Su abuelo ocupó durante años el puesto de embajador de oficio. “Recuerdo que con setenta y ocho años era capaz de recitármelas de memoria. Creo que es algo que me motiva, un aliciente añadido”.

Desde que en 2019 supieron que dos años después serían los designados para liderar la Embajada, se pusieron en el trabajo. Aunque la pandemia provocó una paralización, aprovecharon el tiempo para documentarse, para hacer apilamiento de ideas, siempre dentro de la temática de los templarios y el tiempo de las cruzadas. De ese trabajo surgió el argumento de la Embajada.

"Recrearemos una historia real, basada en la figura de dos personajes, a partir de unos hechos históricos", expone Vicent Bordera. Estas ideas se han puesto ya en común entre la junta de Embajada y la junta de comparsa que ya trabajan en una misma línea. Lo hacen desde la confianza “porque nuestra comparsa es una gran familia en la que no existen distancias por cuestión de edad y ya nos ha demostrado su apoyo total para desarrollar la Embajada”.

La fiesta une

La figura del Banderer, para Nacho Pastor, forma parte de este pack indisoluble que integra junto a Vicent Bordera. “Nos necesitamos los dos. En Ontinyent el cargo de Embajador no tiene sentido sin el Banderer. Además nosotros consensuamos las decisiones que van surgiendo y vivimos este cargo como una gran responsabilidad dentro de nuestras Fiestas porque el acto más importante que tendremos será el último, el que las cierre el lunes por la tarde”.

Nacho Pastor coincide con Vicent Bordera en que "la fiesta une". Y esto les ha sucedido a ellos que han creado un vínculo de amistad que no existía anteriormente con esa solidez. Algo extensible a todo su grupo porque algunos están o viven fuera durante todo el año “incluso en Argentina” y durante la Semana Gran nadie falta en la cita. Vicent Bordera reconoce que "tendré un gran contrincante", en la figura del benimerino Juanan Alcaraz. A la hora de tomar alguna referencia cita a su antecesor en la comparsa, Fran Gil, aunque prefiere matizar que "haré mi propia versión".

Por su parte Nacho Pastor sostiene que "desde que empezamos a plantear la idea de compartir el cargo teníamos muy claro quién tenía que ocupar cada puesto". El trabajo con los versos de Cervino es un añadido que no tienen otros cargos fuera de la Embajada. Esto obliga a un trabajo que ya se está desplegando. “La ensayo incluso con mi hija. Y también con Nacho, por supuesto”, afirma Vicent Bordera.