Las fiestas fueron suspendidas en su totalidad. Sin posibilidad de enmienda parcial. Algunas comparsas han preguntado sobre la posibilidad de celebrar las tradicionales cenas que, otros años, comenzaban en la última semana del mes de junio. Sin embargo, la respuesta que se han encontrado por parte de la Sociedad de Festeros y del Ayuntamiento es coincidente y sin fisuras. No habrá ningún tipo de celebración. Ni previo ni durante. El consistorio no autorizará, en ningún caso, la ocupación de la vía pública para que comparsas, con o sin banda de música, repitan la estampa que tradicionalmente invade Ontinyent durante las semanas previas a la celebración morocristiana. Tampoco, a día de hoy, se ve factible que la imagen de Cristo de la Agonía sea trasladada de Santa Ana a San Carlos.
La cancelación acordada en el mes de abril, de forma unánime por las 24 comparsas, es irreversible. “No va a organizarse ningún acto festivo ni desde la Sociedad de Festeros ni desde las comparsas. La suspensión es total, no parcial”, manifiesta rotundo el presidente Vicent Pla. El máximo mandatario de la Sociedad de Festeros ha mantenido sendas reuniones con los presidentes de las comparsas en las que se han abordado ésta y otras cuestiones como la liquidación definitiva del ejercicio económico.
Por su parte desde alcaldía también se lanza un mensaje claro: "no se autorizará la ocupación de la vía pública para actas de comparsas", sostiene el alcalde Jorge Rodríguez. Con o sin banda de música. El alcalde remite a la regulación legal de la situación. “Cualquier grupo, festero o no, puede reunirse en bares o restaurantes siempre que se garanticen las medidas de higiene y seguridad vigentes. La responsabilidad es de los establecimientos hosteleros. Pero no puede permitirse la celebración de cenas de comparsa tal y como las entendemos”.
Además, cabe sumar que buena parte de los locales que albergan las sedes sociales de las comparsas de Moros i Cristians de Ontinyent no disponen de licencia oportuna, lo que podría incrementar riesgos y repercusiones. Hay pues plena sintonía entre Ayuntamiento y Festers respecto a esta oposición a rescatar parte de las actividades que rodean nuestras fiestas. El panorama de las calles y plazas de Ontinyent durante los sábados de verano estará marcado por la ausencia de cenas con banda.
Por lo que respecta a la Baixà de Crist, todos los estamentos coinciden en que a día de hoy no se dan las condiciones para que pueda celebrarse de manera extraordinaria.
No se autorizarán ni las cenas de comparsa ni una Baixà extraordinaria
