Ontinyent aprueba macropuente para la Feria de Noviembre

No tendremos Moros i Cristians, no tendremos tampoco día festivo el lunes 23 de agosto. Pero puede que sí tengamos Fira. Así lo piensan desde el Ayuntamiento de Ontinyent y por eso han decidido trasladar la fiesta local de agosto al viernes 19 de noviembre, creando así un gran puente de Fira.
Siempre sin perder de vista la situación y la evolución de la Covid-19. Hemos visto en más de una ocasión como cuando el virus parecía controlado, los indicadores han cambiado rápidamente en cuestión de días. Por eso desde el consistorio son prudentes y afirman que siempre se tomarán las decisiones teniendo en cuenta la salud y la seguridad de la población.

Sin embargo, el gobierno local quiere tener esperanzas en que sea posible celebrar la Feria de Noviembre, “y que ésta sea el primer evento festivo que Ontinyent pueda volver a celebrar”. La concejala de Fiestas, Àngels Muñoz, destaca que los feriantes están siendo uno de los sectores más perjudicados por la pandemia y afirma que “todo está prácticamente preparado para poder celebrar la Fira de forma segura, ya que el año pasado ya trabajamos para a esto, con el supuesto de que se pudiera celebrar”. Por último ese plan elaborado no pudo llevarse a cabo.

CONTROL DE ACCESO
Se tendrá en cuenta las restricciones que existan en ese momento, pero Muñoz defiende que el recinto ferial es un espacio que puede ser completamente delimitado para regularizar el acceso al mismo de una forma u otra. “Sobre todo en lo que respecta al espacio de las atracciones. El resto de actividades que rodean la Fira se estudiarán una vez nos acerquemos a la fecha y conozcamos la situación sanitaria”.

Por muy avanzada que esté el proceso de vacunación, cuesta imaginar que en tan sólo unos meses podamos celebrar una Feria de Noviembre tal y como la recordamos. Pero el objetivo del consistorio es poder recuperar parte de lo que hemos perdido, social y festivamente hablando.

SEGUNDA OPCIÓN
El año pasado, después de la cancelación de las Fiestas de Moros i Cristians, el festivo del 'lunes de las Embajadas' pasó al 7 de diciembre. Desde la concejalía de Fiestas admiten que en esta ocasión también se planteó como primera opción. Pero esta propuesta tenía un inconveniente, la normativa que regula el comercio no permite cerrar tantos días seguidos las grandes superficies. “Al final era una fecha que no beneficiaba al sector comercial. Muchos habrían tenido que abrir igualmente y no podrían haber disfrutado del festivo”, explica Muñoz.

Por eso se planteó esta segunda opción, que acabaron viendo como la más adecuada. Así la concejala insiste en que los trabajadores del mundo de la feria han pasado, y están pasando, grandes dificultades para poder sobrevivir sin ningún tipo de actividad. “Por eso pensamos que dar un día más festivo durante la Fira e inaugurarla el jueves por la tarde, en vez del viernes como era habitual, puede incentivar a la gente a acudir a las atracciones. Además, los feriantes suelen estar ya instalados en Ontinyent, por lo que no les supondrá ningún tipo de molestia”.

Éste es el planteamiento, ahora habrá que confiar en la vacuna y en el sentido común y la responsabilidad para poder disfrutar de una de nuestras festividades más importantes. Lo que está claro, es que con Fira o sin ella, noviembre nos espera con cuatro días festivos.