Para empezar el año no sabía muy bien que receta elegir, soy demasiado dulce respecto a gustos a veces y casi siempre que me pongo a pensar en cocinar me vienen a la cabeza magdalenas, tartas o chocolates. Como hay que comer de todo he decidido publicar una quiche de espinacas y puerros con queso de cabra y jamón. Cuando vi esta receta no fue amor a primera vista pero me llamó bastante la atención, hacía mucho tiempo que no cocinaba quiche. Siempre suelo hacer más pizzas o cocas saladas. Tenía de todo en la nevera así que excusas había pocas, como veréis es muy fácil de hacer y no tiene desperdicio.
¿Qué es una quiche? Es una tarta salada de origen francés (Quiche lorraine). Toda quiche que se precie se elabora con huevos batidos, crema de leche y masa quebrada. Los rellenos son infinitos, de verduras, carnes, embutidos…. Siempre me gusta darles un toque personal a las recetas y acabo cambiando algunos ingredientes, en este caso la crema de leche la sustituyo por nata para cocinar y la masa quebrada por hojaldre. Ahí ya no entro, cada cual que ponga lo que más le guste.
Apuntad que vamos:
- 2 manojos de espinacas frescas
- 2 puerros (Solo la parte blanca)
- Ajos tiernos, al gusto
- 1 calabacín
- 2 lonchas de jamón serrano
- Queso de cabra en dados, al
- 1 Tabla de hojaldre fresco
- 2 huevos
- 100 ml de nata para cocinar
- Sal, pimienta y nuez moscada
Empezamos engrasando un molde de horno redondo y con paredes altas, en él extendemos la masa de hojaldre alisando bien la superficie y dejando que los bordes se peguen a las paredes, deben quedar todos a la misma altura. Pinchamos con un tenedor toda la masa de hojaldre para que no suba en exceso en el horno. Metemos al horno caliente a 180º hasta que veamos que queda doradita. En este paso también podemos usar garbanzos secos para que el hojaldre tenga peso y no suba.
Mientras tanto y vigilando el horno preparamos el relleno (no debe quedar muy doradita, después volverá unos minutos más al horno).
Las espinacas las limpiamos bien con agua fría y les damos un hervor, escurrimos y reservamos.
En una sartén echamos los ajos tiernos a trocitos, añadimos los puerros cortados por la mitad y en rodajas muy finas. Cuando los puerros estén tiernos añadimos las espinacas y seguidamente el calabacín cortado también por la mitad y en rodajas finas. Salpimentamos y cuando veamos que está bien cocinado lo retiramos del fuego.
Este sofrito lo esparcimos por encima de la masa de hojaldre bien repartido por todo y sin exceso de aceite.
En un bol mezclamos 2 huevos batidos con la nata y las especias, vertemos encima de la quiche y colocamos por encima el queso de cabra y el jamón en trozos al gusto.
Metemos al horno caliente a 200º durante unos 8-10 minutos, sacamos y dejamos enfriar.
¡¡¡Espero que os guste!!!