Los seguros imprescindibles para las empresas en 2024

El desarrollo de actividades empresariales conlleva una amplia variedad de riesgos que pueden afectar tanto a las propias empresas como a personas y organizaciones que interactúen con ellas. La normativa española establece una serie de seguros de contratación obligatoria, pero la rápida evolución de la sociedad y de la tecnología van generando cada día nuevos riesgos a los que hacer frente y para los que el seguro ofrece diversas soluciones, tal y como explican desde Quality Brokers.

Obligatoriedad
Dependiendo de la actividad a la que se dedique, cada empresa está expuesta a riesgos diferentes, pero hay algunas coberturas que la normativa exige a cualquier empresa, independientemente del sector en que opere. Esta es la relación de seguros obligatorios:

  • Seguro de Accidentes de convenio. Esta cobertura debe contratarse siempre que la empresa cuente con empleados y su actividad esté sujeta a un Convenio Laboral. Este seguro cubre los daños que puedan sufrir los trabajadores por accidente y que tengan como consecuencia la invalidez o el fallecimiento.
  • Seguro para vehículos comerciales. Es obligatorio suscribir un seguro si la empresa cuenta con algún vehículo destinado a la actividad que desarrolla, ya sea un coche, una flota o cualquier otro tipo de medio de transporte.
  • Seguro de Responsabilidad Civil. No hablamos de un seguro obligatorio universal, pero son muchas las profesiones y actividades empresariales a las que se exige contar con un seguro de Responsabilidad Civil. Abogados, profesionales sanitarios, arquitectos o empresas de seguridad son algunos ejemplos en los que este seguro es un requisito imprescindible para trabajar.

Sectores
A todos ellos hay que añadir otros que están pensados exclusivamente para sectores específicos, como la construcción, el transporte de viajeros, el transporte marítimo, etc. Sin embargo, hay otros seguros que, sin ser obligatorios, son muy recomendables para garantizar la estabilidad de las empresas. En las pymes, por ejemplo, destaca el seguro multirriesgo que cubre los percances que pueden ocurrir en las instalaciones de la empresa, ya sean un comercio, una oficina o un taller.

Riesgo cibernético
Además, según avanza el siglo XXI, van surgiendo nuevos riesgos. Un caso claro es el riesgo cibernético. La creciente digitalización, la gestión de datos personales o la consolidación del comercio electrónico ha disparado los riesgos asociados a la tecnología. Una empresa víctima de un ciberataque puede ver seriamente comprometido su futuro, de ahí que no siempre baste con adoptar medidas preventivas y cada vez sea más frecuente suscribir un seguro que cubra los ciberriesgos.

Protección
Por otra parte, nos encontramos en una sociedad en la que las personas son cada vez más conscientes de sus derechos. Esto se traduce en un incremento sustancial de las denuncias contra la empresa y contra sus directivos, que pueden acabar respondiendo incluso con su patrimonio personal. De ahí que también haya aumentado la contratación de pólizas de Responsabilidad Civil de Productos y de D&O, cuya finalidad es proteger a los directivos y administradores de las empresas.