Padre Ángel: “Las iglesias han de estar abiertas 24 horas”

Avance de la entrevista que publicará este sábado El Periòdic d’Ontinyent con el fundador de Mensajeros de la Paz.

 

Llegaba con el tiempo justo a Ontinyent, vía AVE de Villena. Visita meteórica para recibir honores, reconocimiento y aplausos, para ser vendedor por unos minutos en la tienda de Martínez Valls, compartir coloquio con los usuarios del Proyecto Trèvol y entregar los premios a las empresas solidarias. Y, después, regreso rápido para embarcar a la una de la madrugada hacia Honduras y El Salvador donde su asociación, Mensajeros de la Paz, desarrolla proyectos de cooperación en comunidades necesitadas. El sacerdote Ángel García Rodríguez, popularmente el Padre Ángel, es conocido por sus intervenciones en los medios, por su talante y por su compromiso con los más desfavorecidos. -Hace una semana el Papa Francisco le pedía que abriera una iglesia 24 horas en Roma tal y como lo ha hecho ya en Madrid en su parroquia de San Antón.

¿Se pueden abrir iglesias 24 horas en todas partes? ¿Sería factible en una ciudad como Ontinyent?

– “Las iglesias han de estar abiertas las 24 horas. No han de servir sólo para decir misa sino para que la gente pueda entrar en ellas a descansar, rezar, desayunar, asearse… las iglesias han de ser como mesas camilla, con gente dispuesta a acoger. Han de ser casa de todos y no sólo para algunos. Y esto significa actuar con sentido común. Si tuviéramos un negocio de peluquería o estanco o farmacia, nos plantearíamos la posibilidad de funcionar como lo hacen otros, ofreciendo un servicio las 24 horas, porque a la gente hay que intentar atenderla siempre. El ‘negocio’ de la iglesia es la gente y también ha de estar disponible y abierta en cualquier momento”.

Usted está en la línea del Papa Francisco. ¿Qué mensaje de renovación está intentando trasladar en estos tiempos?

– “Precisamente esto: abrir las puertas. Salir afuera y, al mismo tiempo, dejar que la gente entre. Convertir la iglesia en un verdadero hospital de campaña, que los sacerdotes no seamos funcionarios sino pastores”.

Entrevista completa con el Premio Príncipe de Asturias de la Concordia este sábado en nuestra edición de El Periòdic d’Ontinyent.